un trabajo de género

mañana tengo una entrevista de trabajo. vamos a ver lo que pasa, y ¡coño! ¡a ver si pasa algo!.
El trabajo no es que me haga especial ilusión, pero bueno, es de Educador de Menores en el Almanjayar (o como se escriba), bueno, mejor dicho, persona expuesta a que le hagan "sabe dios qué", ya que el barrio tiene fama de todo y nada bueno.
y si es que estoy un rato ya cansado, tengo la necesidad imperiosa y economica de trabajar, de hacer algo, aunque el miedo se apodere de mí, las ganas supongo yo que están más arriba, al fin y al cabo "la guita es la guita"...


Así que me levantaré por la mañana, me pondré una camisa bonita, no demasiado informal ni demasiado formal, creo que hay alguna por ahí, unos vaqueros que no sean del todo "modernos", sin roturas, y unos zapatos, me peinaré y me enfundaré mi mejor sonrisa, esta que pongo en todas las fotos de "bueno, ¿vamos a acabar ya?", para intentar conseguirlo, conseguir un trabajo que no termina de ilusionarme, pero con el que se podrían abrir muchas puertas, y ahora es cuando pienso en todas las cosas que hacemos, en todas las cosas en las que trabajamos o estudiamos, cosas que no nos llenan del todo, pero que las hacemos para intentar conseguir un puesto en la sociedad, una forma de vida y un dinero para costearla.
porque en el fondo soy un sentimental, demasiado sentimiental, me encantaría ser director de cine, escribir todo el tiempo, planificar, vivir del cine, ver cine, pero es más que imposible. Y ya no es por ser derrotista, y no voy a entrar otra vez en el tema, que me pongo pesado. pero es que este mundo está muy mal. demasiado mal. Aún así yo quiero ir sigiloso como una serpiente e intentar hacer algo, grabar este cortometraje que tengo ahora en mente y empezar poco a poco trabajando lo que pueda, creando por mi cuenta, hasta tener suficientes armas para poder enfrentarme a una productora... y saltar.
la pena es pensar en todas las cosas que he hecho y en los caminos equivocados, el haber estudiado una carrera que me gustó, que me deprimió y que me ofreció unas salidas que me gustaron, pero que resultaron ser las más complicadas de tomar, como la Violencia de Género, un tema muy cerrado para los hombres, quizás por su culpabilidad en el tema.

En fin, que yo solo quería contar la experiencia de recibir una entrevista, que en todos los años que llevo en Granada, no he tenido muchas que digamos, exactamente 2, aunque si he estado trabajando aquí.

Así que ya contaré a ver lo que pasa.

suena: Mad World, de Gary Jules

Las fotos son bastante impactantes, me refiero a las últimas dos, que están en francés, pero es fácil de entender, porque hay cosas que no precisan de traducción. Aún así: la violencia contra las mujeres es un deporte universal.